
Izquierda: Carlos Zedillo, Derecha: Alberto Kalach, foto de Andy Butler
Olivia Foundation se ubica en un edificio de la época porfiriana en la colonia Roma de la Ciudad de México. Originalmente concebido como residencia privada, la estructura del edificio refleja la intimidad de habitaciones de escala doméstica, así como espacios y detalles moldeados por sus funciones pasadas. En 2022, Alberto Kalach, en colaboración con Carlos Zedillo, reimaginó el edificio. Su intervención transformó una casa construida hace más de un siglo en un espacio artístico distintivo. A lo largo de cuatro niveles, los cambios de escala, luz y materialidad crean un marco único para apreciar y experimentar arte moderno y contemporáneo. El diseñador y editor Andy Butler platicó sobre el proyecto con ellos en agosto de 2024.
Andy Butler: ¿Cómo surgió el proyecto y qué los llevó a unirse para colaborar en él?
Carlos Zedillo: Alberto y yo hemos colaborado en varios proyectos a lo largo de los años, y una de las áreas que hemos explorado extensivamente es la reinvención del uso de edificios existentes. En lugares como la Ciudad de México, hay un gran potencial para reutilizar lo ya construido. Una de las características más interesantes de estas casas antiguas es que están hechas principalmente de madera. Así que el proceso consistió en desmontarla y volver a ensamblarla, lo que fue un excelente ejercicio de aprendizaje. Fue tanto un ejercicio arquitectónico como de restauración, donde los límites del proyecto fueron definidos por lo que ya existía. Cuando Alberto me presentó a los clientes, se trataba de usar lo que ya estaba ahí y tomar decisiones juntos.
“Creo que logramos darle nueva vida a una casa antigua. Siempre fue una casa encantadora. Nos complace que no haya perdido su carácter y que esté lista para muchos años más”.







Olivia Foundation, fotos de Andy Butler y Sergio Lopez
AB: ¿Cuál fue la parte más desafiante de la renovación?
CZ: La parte más compleja fue la burocracia en torno a estas casas protegidas en la Ciudad de México. Los permisos toman más tiempo que el propio trabajo. Estas casas están protegidas bajo un plan de preservación patrimonial, y el proceso es muy largo. Sin embargo, una vez obtenidas las aprobaciones, el trabajo avanzó sin problemas.
AB: ¿Cuáles fueron algunas decisiones clave sobre el diseño final?
Alberto Kalach: Primero, quiero aclarar que muchos de los proyectos de restauración que realizamos son en colaboración con Adriana León, quien también participó en este proyecto. Con respecto a tu pregunta: cuando se decidió que el espacio funcionaría como una galería, intentamos hacer los interiores lo más neutrales posible. Abrimos un poco más los espacios, eliminamos algunos detalles, molduras y elementos que podrían distraer, y creamos un espacio donde se pudiera apreciar el arte.
AB: Dado que antes era una casa y ahora es un espacio de exhibición, ¿cómo abordaron la iluminación?
AK: El patio ya existía. Aparentemente, era un área de servicio, pero estaba muy oscuro, con balcones y un techo semi-cerrado. Desde el principio, limpiamos y abrimos el patio, y añadimos el invernadero en el último piso. Un invernadero que estaba destinado a plantas, pero que también funciona muy bien como espacio de exhibición.





Olivia Foundation, Fotos de Fernando Marroquin
“Esta casa siempre tuvo sorpresas, como el hecho de tener dos escaleras en una casa tan pequeña, lo que la hace muy dinámica y divertida. Las rutas y secuencias se multiplican.”
AB: ¿Qué aspectos del diseño final son los que más les satisfacen?
AK: Creo que logramos darle nueva vida a una casa antigua. Siempre fue una casa encantadora. Nos complace que no haya perdido su carácter y que esté lista para muchos años más. Esta casa siempre tuvo sorpresas, como el hecho de tener dos escaleras en una casa tan pequeña, lo que la hace muy dinámica y divertida. Las rutas y secuencias se multiplican. También es sorprendente que, con una fachada tan pequeña, sea a la vez misteriosa y compleja.
CZ: Fue hermoso ver cómo Adriana, Alberto y el equipo entendieron el uso del espacio. Descubrimos cómo abrir o cerrar partes del edificio, lo que trajo sorpresas junto con las restricciones estructurales. Por ejemplo, cuando estás en las galerías traseras y puedes ver hasta las ventanas del frente, eso era algo que no se podía percibir en la casa original.
Esto le da a la casa una sensación de profundidad, algo inusual en estas viviendas. Muchas de estas casas estaban muy seccionadas. Poder abrirlas es una lección valiosa. Aunque la casa es pequeña, si la recorres con cuidado, puedes pasar un buen rato en este pequeño museo. Te hace replantearte la escala de los espacios de exhibición.
AB: ¿Cómo se sintieron al ver el espacio lleno de arte por primera vez?
CZ: Las diferentes escalas y tipos de obras que se incluyeron en la exposición fueron una sorpresa: la exposición hizo un uso muy dinámico del espacio. Además, será interesante ver cómo se diseñan las futuras muestras. Hay muchas formas de usar el espacio, lo cual me alegra mucho.